Categoría: POEMAS

BELLEZA

Si algún día el planeta
se salvara
por alguna pandemia redentora
o alguna otra catástrofe letal
de esta plaga dañina
que somos los humanos

el mundo perdería su sentido

porque somos nosotros
los únicos que saben
admirar su belleza

los únicos que aprecian
ese ciclo incesante y deslumbrante
de la vida y la muerte



Los días perplejos (2022, ed. Gato Encerrado)

TIEMPOS MEJORES

Eran tiempos mejores porque el tiempo sobraba
y podía gastarlo en bromas, en ensayos
en juegos, en dar vueltas sin ir a ningún sitio
en derrochar las tardes y las noches insomnes
viendo programas bobos de la televisión
en debates absurdos que no aclaraban nada
y siempre conducían al punto de partida
en planes imposibles que a veces nos creíamos
o en viajes lisérgicos y desbarres etílicos
que devoraban horas con un hambre voraz

Eran tiempos mejores porque nadie advertía
el paso de los días y el peso de los años

No había nada urgente y todo lo importante
podía posponerse indefinidamente


Los días perplejos
Editorial Gato Encerrado

DISTOPÍA

El futuro es entonces
y en la televisión sale la guerra
como un ruido de fondo que entretiene
a los espectadores

que comen distraídos mientras charlan
de asuntos y sucesos sin sustancia
–el tiempo, los deportes, las ofertas
que tienen en el súper de la esquina–

que ven indiferentes la pantalla
durante ese momento intrascendente
en el que las imágenes
les muestran los cadáveres
los cuerpos mutilados
los hombres y mujeres inocentes
que intentan sortear las alambradas
o cruzan en patera algún estrecho

Todo te es familiar en el futuro
pero sientes angustia al darte cuenta
de que eres tú el que sale en la pantalla



Los días perplejos
Editorial Gato Encerrado

PATRIA

                                       A Carlos Ávila

Esa patria que nombran no es la mía
y menos la que exaltan en desfiles
con vivas, uniformes y banderas
manchadas con la sangre de inocentes

En mi patria no hay himno nacional
ni nobles ni jerarcas ni jet set
ni sentamos parásitos
en tronos elevados
sobre yugos y flechas

Nunca vamos a misa
ni cortamos las calles de los pueblos
para que los idólatras
carguen sobre sus hombros
las tallas que veneran

No celebramos fiestas
con toros en el ruedo
mientras los animales peligrosos
aplauden y jalean en las gradas

No podrán los cartógrafos
incluir en un atlas nuestra patria
ni tenemos un nombre
que se pueda buscar en Google Maps

pero no es un lugar imaginario
ni un país irreal
aunque muchos cuestionen su existencia
porque son incapaces de entender
que puede haber lugares sin fronteras
sin himnos, sin banderas, sin costumbres
sin viejos calendarios
que obliguen a acatar
absurdas tradiciones de otras épocas

CASA DE APUESTAS

Si pudiera apostar
en este singular combate a muerte
del ser humano vs. la Tierra

[En un lado del ring
la Tierra, inerme e indefensa
con sus selvas y bosques devastados
sus desiertos crecientes
las aguas hediondas de sus ríos
sus océanos poblados de desechos
el deshielo inquietante de sus polos
su atmósfera abrasada
y todos sus recursos en peligro
por la voracidad enfermiza de una especie

Y en el otro
esa plaga imparable que pulula
por todos los rincones del planeta
como se multiplican
las células de un cáncer agresivo
seres incontrolados
con un ansia insaciable
que esquilma los recursos sin plan B
que transforma sin tregua la materia
en montañas ingentes de residuos
y heces radioactivas
que ya no habrá manera de ocultar]

si pudiera apostar
lo haría, sin dudarlo, por los seres humanos

con todo mi dolor y mi pesar

como el que apuesta
contra su propio equipo
y sabe que ganar
tendrá el sabor amargo
de las victorias pírricas

PLAYA DEL NORTE

Si me dejaras solo

buscaría en el norte

una playa apartada

donde rugiera un mar

huraño y rencoroso

que a mordiscos de espuma

devorara la arena

y se diera de bruces

sin descanso y sin tregua

contra el muro impasible

de los acantilados

a los que subiría

a arrojar mi teléfono

con todos mis contactos

y mis passwords

a las fauces heladas

del Cantábrico

WRONG WORLD

Esa frustrante sensación
al elegir película
en el amplio surtido
que me ofrecen
todas las plataformas

de entertainment

o al empezar a ver
otra serie de moda
prescindible
porque la recomienda
un algoritmo
que procesa mis fallos
anteriores

o al leer otro libro
irrelevante
pescado por azar
en el río incesante
de ediciones
que desembocará
en ninguna parte

esa frustrante sensación
me advierte del peligro
de estar creando
en mi interior
un mundo equivocado